lunes, 3 de octubre de 2011

CALELLA




Una vez más Kike consigue callar a los medios y demostrar que ser finisher es más cuestión de pelotas que de bicis caras o mucho tiempo para entrenar.


Bravisimo el Keniata de Montmeló en su segundo Ironman.


La marea verde funcionó a la perfección y sólo nos vimos superados por una banda de suporters mejicanos. En su contra hay que decir que nosotros no habiamos ingerido la mitad de birra que ellos.


Enhorabuena Kike!

No hay comentarios: